 |
| La Peña Ilusión mostrando papeleta y jamón |
JAMÓN 1 - 0 FÚTBOL
Hacía tiempo que los integrantes de la ilusa e ilusionante Peña Ilusión acariciaban la posibilidad de ser agraciados por la fortuna de conseguir un jamón en el tradicional sorteo que los dirigentes de nuestro fútbol mantienen como piedra angular desde hace generaciones junto al puro habano de algunos aficionados, otro de los símbolos irreductibles de nuestro deporte rey venido a menos. Ayer uno de ellos, Justo, lo consiguió y desde ahora se ha convertido en uno de los más ilusionados al comprobar que los sueños pueden hacerse realidad en cualquier momento. "No es de los más auténticos, pero está muy bueno", le espetó uno de los camareros de la cantina del campo al hacerle entrega del preciado bien comestible. El agraciado se ha comprometido a compartirlo con el resto de los peñistas en una velada para la que se negociarán condiciones y fechas próximamente.
SPORTING DE ALCÁZAR 1 - 1 C.D. SPORT VILLARRUBIA
Fue lo más satisfactorio de la jornada futbolística de esta desapacible tarde en el campo de fútbol municipal que vio como no solo el equipo ha descendido a 2ª regional sino que un sector de aficionados se contagiaron de ese virus maligno de la falta de respeto e imitaron gritos simiescos para humillar a un jugador de piel negra del equipo visitante. Descendieron a 2ª regional como aficionados.
Entre eso, la actitud provocadora de algunos jugadores de ambos bandos, algún entrenador pasado de revoluciones y algunos espectadores de ánimo incendiario, el partido se convirtió en una especie de ring incruento pero agresivo que se trasladaba por oleadas a sectores de aficionados y jóvenes, a los que se pudo escuchar: "estos partidos si me molan", en referencia a los conatos de incidentes que afortunadamente quedaron sofocados. Pareció una vuelta al pasado más siniestro de las épocas de postguerra en los campos de fútbol manchegos.
Pero de fútbol poca cosa. El Sporting local apenas hilvanó juego en medio del campo ni creo oportunidades para hacerse con la victoria. Marcó un gol al contraataque después de que el árbitro ignorase una mano en su propia área que podría haber señalado como penalti. Cometió numerosos errores en el control y administración del balón y permitió que el Villarrubia empatase un partido que no pasará a la historia por sus valores futbolísticos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario