Hoy traigo a mi blog deportivo una curiosidad digna de ser presentada, dado que la he rescatado entre los documentos que mi padre tenía acumulados como recuerdos, sin mucho orden, por cierto. Se trata de una estampita, de esas que se repartían en las Iglesias, de La Divina Pastora, invocada como patrona del Deporte y en cuyo dorso aparece la siguiente leyenda:
LA DIVINA PASTORA
La Divina pastora es la Virgen predilecta de los deportistas, y por eso la invocan como Patrona. Y es que su imagen que nos habla de su vivir deportivo, al aire libre, cautiva a aquellos que gustan de las ráfagas puras de la montaña, de los dorados rayos de un sol campero, de las cumbres vírgenes coronadas de nieve. Su oración litúrgica misma parece una paráfrasis pidiendo la realización del ideal deportivo "mens sana in corpore sano", como puede apreciarse en las palabras subrayadas.
¡OH DIOS! que regís el mundo con inefable providencia, concédenos, intercediendo la siempre Virgen María, la cual con vigilante cuidado nos apacienta, que defendidos de los enemigos y saciados con la dulzura de vuestro fruto, seamos conducidos a la Patria Celestial.
Adquiere el librito "También el Deporte..." por el P. Enrique María de Cevico, Capuchinos de Gijón y Centro de Propaganda, Plaza de Jesús, 2. Madrid.
Editada la estampita por: Casa Bañeres. Plaza S. Jaime, 6. Barcelona.
Cada cual que saque sus propias conclusiones y comentarios.
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