En la mañana del pasado domingo, se reunieron por primera vez en este año 2017 algunos de los integrantes del I.C.C. quienes, junto a otro trío de históricos del ciclismo manzagato, a modo de presentación oficiosa de la actual temporada y como modo de configurar un calendario con sus salidas más importantes.
El día estaba desapacible por el fuerte viento reinante, pero la temperatura no era fría en exceso, lo que unido a las ganas de pedalear por carretera y al empuje favorable de inicio del propio viento, hizo que la ruta hasta Almagro fuera un paseo plácido aunque envenenado si se piensa en la vuelta. No fue eso lo peor. A la salida de Almagro en dirección a Moral, Fontaine se vio atrapado entre la rueda trasera de su antecesor y el terraplén de la cuneta obligándolo a rozar irremediablemente y caer de su bici aunque con gran fortuna personal y daños reparables en taller en su bici.
Tras unos momentos de incertidumbre y búsqueda de soluciones inmediatas, Toni El Pocero logró
contactar con su familia y, a la media hora, se presentó su hijo con una rueda preparada para la sustitución de la averiada. Diligencia, generosidad y espíritu resolutivo que Fontaine agradeció finalizada la vuelta e intercambiada de nuevo la rueda para su posterior reparación.
Antes quedaba un regreso por la misma ruta pero en sentido contrario al viento, que azotaba cada vez con más fuerza. Ni los disciplinados relevos, ni la búsqueda del flanco más favorable consiguieron amortiguar un esfuerzo que dejó mella en casi todos los ciclistas que llegaron finalmente al punto de salida en el aparcamiento de la Plaza de Toros.
Después, comida en Los Desmontes de Membrilla, como estaba programado, con un salón lleno de comensales y en donde los miembros del ICC, a los que se unió el manzagato Félix, dieron cuenta de un sabroso y abundante menú y fijaron fechas y posibles rutas para ir avanzando el calendario ciclista de este recién estrenado 2017.
