Como ya sucediera ante el C.D. Talavera hace unas fechas, el Gimnástico de Alcázar ha logrado remontar un adverso resultado frente al Toledo, después de encajar un gol a los cinco minutos del primer periodo de falta directa y otro al filo del descanso tras un buen disparo lejano de los toledanos. Sin embargo, en la segunda mitad, los alcazareños han vuelto a demostrar que son capaces de lo mejor y se han lanzado a por la victoria gracias al buen juego de Alberto, que apareció tras el descanso y logró el primer tanto tras una buena arrancada y un fenomenal disparo cruzado. Sin duda es el jugador más esperanzador del equipo rojo en esta temporada y es raro que el entrenador no lo mantenga durante todo el encuentro. En esta segunda parte, además, se vieron fases de buen juego, moviendo acertadamente el balón y consiguiendo entretener a los habituales espectadores que presenciábamos el partido, pese al frío y la lluviosa tarde.
Con la defensa firme, especialmente por los laterales, donde los hermanos Olivares se reafirman por su seguridad y eficacia como unos baluartes imprescindibles y con Javivi ejerciendo de pivote en el centro del campo, el equipo ha logrado equilibrar el marcador con un segundo gol a falta de quince minutos para la conclusión del partido y si no ha logrado la victoria ha sido por la magnífica parada del portero toledano que ha salvado a su equipo de salir finalmente derrotado.
En cambio, ayer por televisión, el Real Madrid me defraudó por su juego una vez más, aunque, todo sea dicho, realizó un partido práctico, correoso y dio muestras de ser un equipo difícil de derrotar. Este era uno de los objetivos inmediatos de su actual entrenador, Juande Ramos, y vaya si lo está consiguiendo. La defensa apenas pasó apuros y los escasos ataques numantinos, los resolvió con suficiencia. Pepe y Cannavaro están a un gran nivel. Por contra, el centro del campo sólo destaca en su faceta defensiva, puesto que Lass y Gago se muestran contundentes y es complicado superarlos, mientras que en el plano ofensivo, ninguno de ellos logra dirigir ni lanzar al equipo adecuadamente y, lo que es peor, ni siquiera Sneijder, hasta ahora uno de los más fiables, atraviesa un buen momento, lo que unido a la baja de Guti hace que el equipo esté romo de ideas y de fluidez en su juego. Sólo Robben y Raúl, cada uno con su estilo y cualidades, marcan el plus de efectividad necesario para salir triunfadores de campos en los que el Madrid debe puntuar siempre.
Por la mañana y en directo he vuelto a presenciar el partido de Fútbol Sala del equipo de mi hijo Héctor, el Asecoman Vodafone, que ha vuelto a ganar por tercera jornada consecutiva y por un contundente 5 - 1. Esta vez ante el Construcciones Rivas, en el que juegan mis antiguos alumnos, los hermanos Ismael y Cruz Javier, que han perdido los nervios ante una fea entrada que el árbitro, Sr. Valle no ha sabido apreciar. Sin embargo la reacción de Ismael ha sido desproporcionada y ha terminado siendo expulsado. Pero aparte de este incidente, el equipo dirigido por Jimy ha sabido mover el balón con calidad, abrir espacios y finalizar con puntería algunas de sus jugadas, dando lugar a espléndidos goles de entre los que yo destacaría el primero de Héctor tras una buena pared con Santi, otro de Alex Samper, que regateó a todos sus defensores y, por último, uno extraordinario de Santi, que enfiló la puerta contraria y lanzó un soberbio chut desde la derecha que batió al guardameta por uno de los ángulos de la portería. Si sigue la racha, este equipo debe finalizar entre los primeros puestos de la competición porque calidad y fuerza no les falta. Sólo deben creer más en sus posibilidades.
