domingo, 28 de febrero de 2010

CONTUNDENTE MADRID Y POR LA ZONA AGUAS MIL




RUTA CICLOTURISTA POR EL CANAL DEL GUADIANA

En la mañana del domingo día 28 salimos por la vía de servicio en dirección a Alameda de Cervera con las bicicletas todo terreno. La primera sorpresa nos la llevamos al llegar justo hasta el cauce del río Záncara, hasta ahora seco a pesar de todo lo caído y, justamente a nuestro paso, hemos visto como el agua venía llenando poco a poco los terrenos del mismo.

Continuando con la ruta hemos seguido el curso del Canal del Gran Prior que continúa desde Alameda en dirección a Argamasilla de Alba, a contracorriente, observando la fuerza con que el agua discurre por el ancho margen y salta en los numerosos puentes de pequeños ojos que lo cruzan en distintos momentos del recorrido.

El espectáculo es digno no sólo de contamplarse sino de grabar a fuego en nuestras retinas ante la duda de cuando volverá a repetirse. Las fotos de algunos de estos recorridos dan fe de todo lo que narramos y además nos muestran un bello paisaje, por ahora ocre en sus tonos pero que está comenzando a verdear y que lo hará en todo su esplendor a poco que apriete el sol.

Esta ruta está salpicada de bombos, esas construcciones típicas del mundo rural de esta zona próxima a Tomelloso y que le confieren una peculiar fisonomía. Viñas inundadas, pozos rebosantes y ramas del canal desbordando los terrenos adyacentes, son las imágenes que se pueden contemplar en estos momentos. Un placer para la vista y un gozo para quienes sufrimos el permanente rigor de esta tierra seca y desolada casi siempre.

TENERIFE 1 - 5 REAL MADRID

En la tarde del sábado y en el campo del Tenerife, "lugar maldito", según nos adelantaron en las previas los profetas de las debacles deseadas para el equipo blanco, el actual Real Madrid dio todo un recital de eficacia, alcanzando la cifra más alta de goles de toda la historia de la Liga a estas alturas de competición con 64 tantos.

El partido comenzó, como viene siendo ya habitual, con dominio incierto y búsqueda de control en un medio campo donde cada vez hay más compenetración y con una presión desde arriba por parte de los madridistas, que de esa forma evitan la inicial acometida de sus rivales, sin que éstos pasen apenas del centro del campo gracias a la gran labor defensiva de todo el conjunto y especialmente de los centrales, en este caso Albiol - cada vez más asentado - y Garay que está demostrando el acierto de su fichaje.

Casillas interviene mucho menos y cuando lo hace, minuto treinta, demuestra por qué está considerado el mejor portero del mundo. Realizó una parada soberbia en una de las escasas ocasiones con peligro de los tinerfeños. Para entonces se veía venir que al menor descuido, los delanteros madridistas harían mella en la defensa rival y así Marcelo puso en evidencia a la defensa entrando casi en solitario y facilitando a Higuaín la consecución del primer tanto de tiro cruzado. El segundo no tardó en llegar al realizar un ataque a tres toques entre Alonso, Garay y apertura de éste para que de nuevo Higuaín marcase de tiro al primer toque. Un gran gol.

En la reanudación nueva demostración de la incompetencia arbitral al conceder un gol tras golpear dentro del área pequeña un jugador a las manos de Casillas cuando este había atrapado ya el balón. Ni los árbitros juveniles dudarían en estas decisiones y sin embargo, nuestros colegiados se ponen ellos mismos en evidencia. Lamentable.

Pero afortunadamente Kaká puso al minuto las cosas en su sitio y marcó un gran gol desmarcándose con rapidez y cruzando al balón fuera del alcance del portero. A partir de ahí estaba claro que el Madrid sólo tenía que aguantar el marcador y esperar las ocasiones para contraatacar. Así lo hizo y los dos siguientes goles fueron consecuencia de esa paciencia necesaria que propició el penalti marcado por Cristiano y el último de Raúl, evocando su acreditado sentido de la anticipación y consiguiendo de esta forma un gol que le hace superar el record de Don Alfredo Di Stefano, nada más y nada menos. Raúl lo merece por toda su trayectoria y fue una buena compensación a su ya asumida suplencia y declive que acepta con encomiable elegancia y grandeza.

lunes, 8 de febrero de 2010

SENDERISMO, CICLISMO Y FÚTBOL



SENDERISMO POR VALDEHIERRO

El pasado sábado 6 de febrero salimos en pequeño grupo de tres, Pedro El Joven, Antonio Garrido y yo, para recorrer el precioso paraje de las sierras que rodean la ermita de Valdehierro, cercana a los municipios de Puerto Lápice, Madridejos y Consuegra.
Lo que me ocurrió fue insólito pero aleccionador. Llegué al lugar de la partida sin la rueda delantera de mi bicicleta. Ya era imposible rectificar, no merecía la pena. Así pues, mis compañeros emprendieron la ruta a bordo de sus bicis, mientras yo me puse a caminar vadeando los arroyos, saltando los charcos y contemplando un panorama ciertamente espectacular. Era lo que había deseado, pero sobre el suave deslizarme con las dos ruedas, abarcando más paisaje y llegando a los puntos más atractivos del recorrido, que de esta forma no pude alcanzar.
Mereció no obstante la pena, porque siempre el viaje a pie, la musa pedestris, como decía el profesor López-Aranguren, es el modo más auténtico de saborear los aromas, sentir las cuestas y las bajadas, en suma, de formar parte de esa naturaleza desbordante que te envuelve.
Y llegué tras hora y media de caminata, con dolor en los músculos por falta de costumbre, pero contento.


CICLISMO POR LOS CAMPOS DE MONTIEL



Invitado por los componentes del Club Ciclista Internacional, representado en la figura de M. Renard, acudí a su cita en la mañana del domingo 7 de febrero, no sin antes cometer una nueva torpeza o despiste: dejarme las zapatillas de montar en casa y tener que regresar con urgencia. Tras superar una intensa niebla llegué hasta Tomelloso y desde allí de nuevo en coche hasta La Solana. En esta localidad se fijó el inicio de la ruta ciclista y la presentación del grupo, en el que únicamente uno de sus componentes me resultó desconocido, José Angel Dominguez, compañero de profesión y de afición, por lo que no resultó nada complicado el rápido entendimiento.

Tomamos la carretera que conduce a Villanueva de los Infantes, uno de los nombres de pueblo más bonitos de nuestra geografía y tras pasar por delante de la presa de Vallehermoso, ahora plena de agua, iniciamos uno de los rituales a los que no estoy acostumbrado, pero que me complace cuando se ejecuta con buen ritmo y complicidad, los relevos. En este caso lo hacíamos cada kilómetro recorrido.
Esta técnica, tan usual por otra parte entre los ciclistas profesionales, es el necesario estímulo cuando se quiere avanzar y evitar que la ruta se haga tediosa, especialmente cuando el terreno es llano y la torre de la iglesia del próximo pueblo parece no alcanzarse nunca.

En la plaza de Infantes tuvimos ocasión de tomar un café aderezado por churros, para quienes dudasen de sus reservas nutritivas, así como de fotografiarnos en su precioso conjunto urbano.
Más adelante tomamos dirección hacia Valdepeñas, dejando al paso Alcubillas y Pozo de la Serna, localidad en la que tomamos la carretera a la derecha para continuar hasta San Carlos del Valle, pueblo éste que me recuerda mis inicios profesionales, pues no en vano fue mi primer destino como maestro en los años setenta.

También hubo fotos de rigor y pequeña parada en su majestuosa y a la vez coqueta plaza, que se conserva inalterable con los años. Después acometimos los últimos kilómetros hasta La Solana, atravesando el valle por el que discurre el río Azuer, desbordado en su cauce e invasor de los terrenos cercanos, tantos años secos.

Bernardo sufrió la rotura de uno de los radios de su bicicleta, pero ni siquiera ese incidente fortuito mermó la moral y la buena marcha del grupo, que finalizó la andadura en el punto de inicio para retornar a sus respectivos lugares.

Fue mi bautismo oficial en el International Cycling Club Andermatt-Uri-SWZ. Espero que sea el comienzo de una larga amistad y que mis compañeros del otro club "El loco y sus amigos" de Alcázar, no se sientan celosos por mi doble militancia.


TABLAS EN EL DERBY FUTBOLÍSTICO COMARCAL: GIMNÁSTICO 1 - 1 TOMELLOSO



Después de la experiencia ciclista y a pesar del ligero cansancio acumulado tras los setenta kilómetros de carretera, me trasladé, junto con mi grupo de amigos con los que hacía tiempo que no coincidíamos para ver fútbol, al campo de Alcázar para presenciar el derby comarcal entre los equipos del Gimnástico de Alcázar y el Tomelloso C.F.
Lo más llamativo fue ver una larga cola ante la taquilla del campo municipal como hacía mucho tiempo que no se veía. Alguien la comparó con el agua de los ríos que también corren como no lo hacían en muchos años. Se calcula que unos 600 espectadores asistieron al partido, lo que supone triplicar la asistencia que viene siendo habitual. Que siga la racha.
El partido en su conjunto fue igualado con escasas ocasiones de gol en las porterías y un dominio más acusado por los alcazareños en los comienzos pero que se fue diluyendo a medida que avanzaba el mismo, hasta derivar en un juego de escasa calidad y menos profundidad de lo deseable. El gol tomellosero, que abrió el marcador en el minuto 19, despertó a los locales que trataron de nivelar la contienda con un fútbol hilvanado y rápido que dio sus frutos cuando Alberto, el jugador más incisivo y eficaz de los locales, empalmó una volea que se coló por la escuadra de la portería tomellosera.
A partir de ahí y durante toda la segunda parte, el Tomelloso jugó con más orden y control sin permitir el acercamiento de los locales. Sólo Alberto volvió a inquietar levemente a la defensa contraria pero sus intentos fueron neutralizados con cierta comodidad. Al final, justo empate y a seguir esperando la salida del túnel en el que se siguen encontrando los alcazareños.